miércoles, 12 de octubre de 2011

Ángel Llácer me pone de los nervios


Sé que mucha gente dirá:

“Pero si es un chico muy majo y le da sal y ritmo a los programas que realiza”
Para mí no es razón suficiente. Todo eso es lo quieren hacernos creer, pero yo les tengo calados. Para mí es un tipejo enjuto, con el pelo piedrahitesco, con alma de locaza del festival del día del orgullo (y no del orgullo friki, sino del gay, de los homozezuale). Es la parte esquizofrénica, histérica y exasperante de cada uno de los programas en los que participa. Como ejemplo de todo esto, lo que está pasando ahora mismo, la razón por la que estoy escribiendo estas líneas.

Programa de Tu cara me suena, en Antena3 (sí, además de anuncios, también se pueden ver algunos programas). El señorito Llácer forma parte del jurado, junto a Mónica Naranjo, Latre y alguna otra más de la que no me acuerdo ahora mismo. Todos dicen su opinión y veredicto de la canción que el famoso de turno acaba de interpretar. Pero a nuestro angelito no le basta con eso. Él se levanta, hace espasmos, grita, convirtiéndose así en el verdadero protagonista del programa en cuestión.

–¡Lo has hecho muy bien, Santiago! Pero tienes que sacarle más garra… ¡Aaaarrrgh!

Y a causa de todo esto, no puedo evitar imaginarme a este tío en las tareas más cotidianas del día a día.

Situación: Una mañana en cualquier panadería de barrio. ¿Cualquier barrio? ¡No, el barrio de Ángel Llácer! Los clientes van sucediendo a lo largo de la mañana.

Entra una señora mayor, la típica abuela de familia con numerosos nietos.

–Hola, buenos días niña. ¿Me das una barra de pan y dos cajas de leche?

Después un niño pequeño, de sonrosados mofletes y mocos por toda la cara.

–¿Cuánto cuestan los bollos de chocolate?

–Un euro la bolsa.

–¿Y dos bollos?

–No los vendemos sueltos.

–¿Y a peso?

–No, sólo la bolsa.

­–¿Y tienen cojón de mamut?

–No.

–Bueno, pues… me das una bolsa de gusanitos- dice tras pensárselo mientras se restriega los mocos en la manga del jersey.

Por fin entra el señor Llácer.

¡OYE, PONME UNA BARRA DE PAN! – grita pronunciando mucho la R y sosteniendo la N final. – ¡ME DAS TAMBIEN UNOS CGUASSAEN DE CHOCOLATE! – pronunciando esta vez con un horrible acento francés.

VENGA, MÁS BRIO, SIENTE EL PAN, SÉ EL PAN. MÁS FUERZA, MÁS BRIO. ¡DÉJAME A MÍ, YA VERÁS! – convirtiéndose así, una vez más en protagonista de todo lo que hace.

¿No es para saltar del mostrador y pegarle con la barra de pan del día anterior en la cabeza? Yo estoy seguro de que uno de estos días, le veremos tirarse al suelo, convulsionar violentamente y soltar espuma por la boca. O será asesinado violentamente y en directo por algún otro chiflado como él a golpe de un lenguado congelado al grito de ¡SIENTE EL LENGUADO, SÉ EL LENGUADO! Y en ese momento todos sentiremos una liberación en nuestro interior y descubriremos la grandeza del Nirvana en nuestras auras al haber eliminado de nuestras vidas al duendecillo de polémico, escandaloso y socarrón que trastocaba nuestros chakras.

Si es que tenía que haber visto Granjero Busca Esposa

miércoles, 31 de agosto de 2011

Viajes sin coste adicional



Comen de una bolsa y empiezan a oír unas voces que dicen que les transportarán a los lugares más fantásticos sin moverse del sillón. Y es que por mucho que se empeñen en compararnos la experiencia de comer esos maíces con un viaje en avión, al ver ese anuncio es inevitable pensar que en esa bolsa en vez de maíz hay una cantidad considerable de pastillitas de colores.

Para empezar, el anuncio comienza con un grupo de tres personas sentadas en un sofá, abatidas y cansadas. Cada uno de estos tres especímenes abre una bolsa y al comer el primer grano de maíz una voz comienza a decirles que están en un viaje en avión con destino en la India, Singapur o la fábrica de Chocolate de Willy Wonka, todo depende de la bolsa que hayan escogido.

Yo quiero que rueden ya mismo la segunda parte, en la que se ve la misma sala, pero como si fuera la habitación de hotel de Resacón en las Vegas o de 1408 (Stephen King). En donde la chica está desnuda encima de la mesa cubierta por pintura de diferentes colores, el ricitos esté rapado y muerto encima del sofá, tiñéndolo de rojo sangre y el otro en una esquina, abrazándose las piernas y meciéndose al sonido de: “No le he matado, sólo he liberado al enanito que vivía dentro de su cabeza...”

domingo, 24 de julio de 2011

Poema de verano

Llega el verano, llegan las risas,
llega el calor y la gente con prisas.
Terraza de jazz, cervezas frías,
y para desayunar tostadas con mantequilla.

Más tarde la playa en una ciudad perdida.
Qué bonita la arena que ahora ya nadie pisa.
Pero no todo es bonito, me falta una cosa.
Me faltas tú para darte esta rosa.

viernes, 22 de julio de 2011

La gran batalla

Relato inspirado por esta canción.




En el pueblo de Katterpix, todo se regía según las leyes que su dictador, el Gran Krauss, quería. O eso creía él. Desde hacía unos meses, sus habitantes, cansados de tanto dolor y violencia, decidieron vengarse. Llevaban meses preparando la operación. Si todo salía bien, este acto sería el fin del mandato de Krauss. Con Kirkman al frente, todos los hombres de Katterpix, cogieron espadas, hachas y arcos, se armaron de valor y fueron en busca de la victoria.

Cientos, miles de personas se agolpaban a las puertas del castillo exigiendo la cabeza del Señor. Los primeros intentaban derribar las puertas mediante un gran tronco mientras su líder, Kirman, gritaba:


-¡Estad preparados! ¡No sabemos a lo que nos enfrentamos, pero no nos rendiremos! ¡No tengáis piedad, matad a todo el que se cruce en vuestro camino! ¡Somos más y mejor preparados!-después, de cara al castillo, gritó -¡Krauss! ¡Sal aquí fuera y enfréntate a tu destino! Venimos a mataros, y no nos iremos hasta conseguirlo!


Con el último grito se abrieron las puertas y todos entraron sin mirar atrás. Miles de orcos estaban esperándolos, pero ellos no se amedrentaron. A su paso desmembraban a sus oponentes, cortaban cabezas, clavaban espadas. Pero no frenaban su avance. Decidido, preciso y constante. Hasta el más joven de los guerreros, que no alcanzaba los 17 años, armado con una espada corta, era tan sanguinario como el más cruel de los piratas. Algunos compañeros se desangraban a causa de las heridas que los orcos les abrían en sus cuerpos, pero ellos no se detenían, seguían blandiendo sus armas hasta que el último aliento se escapaba de sus bocas. Al fin llegaron al Gran salón, donde el odiado dictador les esperaba:


-¿Quiénes sois y quién os envía?

-Somos tus esclavos y venimos a mataros.

-Después de todo lo que he hecho por este pueblo, ¿y así me lo pagáis?

-Tú no has hecho nada, sobrevives gracias a nosotros.

-Mide tus palabras, o me veré obligado a castigarte.

-¡Cállate y pelea por tu vida!

-¡Habrás deseado no pronunciar esas palabras!

-¡Adelante, chicos! ¡Sin piedad!


Los arqueros empezaron a disparar mientras los demás entraban en el Gran Salón blandiendo sus espadas y sus hachas. Los orcos les superaban en número, pero eso no les frenó. Los dos ejércitos que poblaba el Salón se enfrascaron en una guerra a muerte por la libertad. Poco a poco, el suelo de la estancia se fue cubriendo de un manto viscoso de color granate, donde los vencidos, orcos y hombres, caían salpicando a los que seguían en pie. Kirman se abría camino entre la batalla. A su paso, veía como sus hombres luchaban con todas sus fuerzas. Uno de ellos estaba casi derrotado. Un orco le había desarmado cortándole el brazo y tirándolo al suelo. Pero, lejos de rendirse, agarró su brazo, que aún sostenía la espada, y se la clavó en la cabeza al orco. Otro buscaba a tientas un oponente con su espada -le habían sacado los ojos- agitándola en todas direcciones, pero con precisión. Los arqueros ya habían guardado sus arcos y ahora peleaban con sus espadas, matando orcos sin piedad alguna. Los hombres de Katterpix luchaban con fuerza y valor, pero con eso no bastaría.


-¡Arrancádles la cabeza! ¡Coged sus armas una vez los hayáis matado! -les ordenó Kirkman a sus hombres.- ¡Y ahora, Krauss, prepárate a morir!


Mataron a todos los orcos, ya sólo quedaba su líder. Todos los hombres se abalanzaron sobre él, pero Krauss se defendía. De un sólo movimiento de espada, la hoja de la misma se llevaba consigo las cabezas, brazos y piernas de sus oponentes. Mientras sus hombres intentaban cansar a Krauss, Kirkman acechaba por detrás del dictador, esperando su confianza. Éste se dio la vuelta, pero ya era tarde. La espada de Kirkman atravesó su pecho, mientras los demás aprovecharon este ataque para ensañarse con él. Krauss estaba ahora tirado en el suelo, pero gritaba con odio:


-¿Creéis que habéis vencido? Me habéis matado a mí, pero otro ocupará mi lugar. Estáis perdidos, y lo sabéis. No podréis sobrevivir sin mí.

-Eso ya lo veremos -dijo Kirkman antes de cortarle la cabeza de un tajo.


miércoles, 13 de julio de 2011

Herencia inconsciente


A buen ritmo de jazz por el amigo Cullum, del que podré disfrutar mañana, 14 de Julio, y después de varios días acudiendo a distintos conciertos se me viene a la mente lo que he titulado Herencia Inconsciente. Se trata de los hábitos, gustos y costumbres que vamos adquiriendo gracias a nuestro entorno.

Estoy seguro de que pocos jóvenes de mi edad saben disfrutar de este tipo de música, ya que lo que más se escucha ahora son variantes totalmente diferentes. Mi caso es completamente diferente. Mis primeros recuerdos musicales se ubican en casa de mis abuelos. Siempre que entraba la casa ya estaba llena de artistas como Louis Armstrong o Miles Davis. Las paredes estaban repletas de discos desde el suelo al techo. En cualquier lugar de esa casa encontrabas diferentes artistas, y mi abuelo sabía en qué lugar estaba el un disco concreto de un artista y una época determinada. Además aprendí a ver con otros ojos instrumentos como la tuba, el piano y sobre todo, el saxofón. Desde que tengo memoria, mi tío siempre ha tocado el saxo. Recuerdo como los dos nos encerrábamos en la salita y me regalaba distintas melodías con las que yo me divertía.

Al mismo tiempo, en este tiempo de verano, llegaba el festival de jazz de Vitoria, al que en un principio iba con mis abuelos y unos bocadillos. Entonces pude disfrutar de veteranos del jazz, como dice mi abuelo. Aquellos veteranos fueron desapareciendo, con la consecuencia de la falta de asistencia a los posteriores festivales. Hablo de mi abuelo, porque su puesto fue ocupado por mi tío, que es el que entonces me llevaba al mismo festival, pero con ritmos diferentes, más modernos. Así conocí a artistas como Jamie Cullum o Santi Ibarretxe con su loco e incomprensible Primital.

Ahora ha llegado el momento de disfrutar de dichos músicos en solitario, quizás con algún acompañante, lejos de aquellos que me enseñaron a apreciar el jazz, pero siempre agradeciéndoles en silencio que me hayan transmitido esta Herencia Inconsciente.

jueves, 23 de junio de 2011

Smooth Criminal

Parece ser que a Michael Jackson le gustaba mucho Star Wars, porque en la canción Smooth Criminal dice claramente: Annie are you wookie? Esto significa en castellano Annie, ¿eres una wookie? Y para los incultos cinematográficos y porque hoy me he levantado generoso, os diré que Chewacca, aquel animalazo peludo que acompañaba siempre a Han Solo (que siempre estaba con Chewacca, entonces no estaría tan sólo. Vamos, digo yo), era uno de esos wookies. ¿Todavía no os enteráis de nada? Tranquilos aquí os dejo el vídeo que aclarará todas vuestras dudas.



¿Y por qué pones esta frikada y no escribes algo propio? Bien, esto es por varias razones:
  • Hacía mucho que no actualizaba esto.
  • La pereza me gana siempre que quiero escribir algo.
  • Porque esta frikada se me ocurrió por la mañana y quería compartirla.
  • Porque sí.

domingo, 12 de junio de 2011

Gafapasta Power

La raza humana se caracteriza sobre todo por dos temas. Saber todo de los demás y que los demás sepan todo de ti. Esa es la única razón por la que existen las redes sociales. Antes de tuenti, feisbuk, tuiter y demás, ya existían los llamados blogs (como éste que estáis leyendo ahora mismo en vez de tomar el sol en la piscina o emborracharos con los amigos, que es lo que tendríais que estar haciendo ahora), lo que dio paso a fotologs y videoblogs.

Las diferencias entre ambas tres residen en su nombre. Con un ejemplo lo entenderéis mejor. Si te ha atropellado un coche, en el blog contarás lo ocurrido y te acordarás de toda la familia del conductor; en el fotolog, además pondrás una foto del momento del atropello y en el videoblog puedes poner el vídeo del momento exacto del atropello o el vídeo posterior al accidente, mostrando las lesiones sin dejarte de acordar de los parientes del conductor, aunque en esta ocasión no escribirás más de 10 palabras.

Como todo lo creado por el hombre para algo bueno, el hombre también lo malogra y lo deteriora. En el blog, en vez de contar los avances del movimiento 15-M, te cuentan que se lo han pasado chupi con sus coleguis, o que la vida es una mierda porque el Richy me ha dejado y ahora está con la Yessi. Parece que algunos blogs son lo que antes llamaban Diario, la diferencia está en que de lo que escribías en el Diario lo descubrían tus herman@s y ya está. Ahora por poco que te descuides, se entera de tu vida medio mundo.

El fotolog fue una moda pasajera de quinceañeros donde meten la misma historia que en blog, pero además con alguna foto significativa respecto al tema que tratan. Si en la descripción escriben lo felices que son porque Pedrito les ha regalado su último sugus, en la foto pondrán un corazón rebosante de amor y pasión; si por el contrario, no han tenido un buen día, pondrán alguna escena oscura y escabrosa con la leyenda: Iros Todos A Tomar Por Culo. Aunque también puede ser que ese día haya sido como otro cualquiera, sin ningún sobresalto ni acto loable que señalar. En este caso, escribirán la letra de su canción favorita y por foto, la del cantante de turno.

Y ahora llegan los videoblogs, donde si el último recurso para defenderte era la privacidad de tu imagen, ya no lo será. El último que he descubierto y que os dejo es uno llamado Gafapasta Power. Adelante, echadle un vistazo, yo espero.


Venga, mira el vídeo, no seas vago.


¿Has aguantado hasta el final? Eres un campeón, en serio. Ahora sabes de que hablo. Para los que no han visto el vídeo, explicaré un poco el contenido. La cuestión es que el tal Iñigo, protagonista del vídeo, se aburre en su casa. Su familia, sus amigos vecinos y demás están ya hasta las narices del niño. Como ya no hay quien le aguante, se ha dicho a sí mismo: Me voy a grabar en vídeo, lo subo a youtube, y lo propago por la red. En fin en el vídeo se explica bastante bien.

¿A vosotros no os parece que youtube sirve para algo más que para ver al niño que parece el hermano perdido de Fidel, el de Aída?

En fin, os dejo, que tengo que subir las fotos de este finde al tuenti, actualizar el estado de facebook y poner esta mierda en twitter.

jueves, 9 de junio de 2011

Perdidos

Jamás me hubiera imaginado que aquellas vacaciones serían tan aburridas. Para una vez que me voy con mis amigos de vacaciones y me paso el día viendo la tele. Sólo me falta un conejo gris de peluche para que mi vida se pareciese a aquella serie, Mr. Floppy. Ahora mismo, por ejemplo, estoy viendo Perdidos.

-Jack, Sawyer ha cambiado.

-Qué raro.

-Te estoy hablando en serio -dijo Kate, aunque se moría por ir detrás del matorral con el doctor, le daba igual si le pillaba el oso polar de turno- Ya le he notado raro estas últimas semanas. Empezó hablando con todo el mundo, decía nosequé de un teto, se pasaba la tarde entera metiendo su dedo en los oídos de los demás, no sin antes habérselo lamido a conciencia. Y por la noche, en vez de dormir, va deambulando por el campamento cantando alguna cancioncilla estúpida, cada noche una. Vamos, que parece aquello una atracción de autos de choque; siempre dando por el culo. Además no sé si te has dado cuenta, pero tiene más pelo que de costumbre. Para mí que se está transformando en un animal.

-Eso son cosas de la edad, es normal, a todos nos pasa. Y ahora déjame, que estaba a punto de cazar a Gyarados. -Jack no había escuchado una sola palabra de lo que Kate le había dicho, pero al oír la última frase, dejó la máquina a un lado y le cogió frenéticamente -¿Has dicho en animal? Eso me recuerda una historia de mi época de doctor.

-Ya estamos otra vez con las batallitas.

Aquí hubo un flashback. Porque esta serie se basaba en la historia de unos colgaos que vivían en una isla y de flashbacks. Sí, pasaban cosas interesantes y todo eso. Pero ya podías estar viendo como el cocainómano cuidaba del bebé de la otra rubia, que de repente aparecía el gordo comiendo en un bufet libre en sus años mozos. Que esa es otra. El tío está en una isla desierta, donde escasea la comida y se pasa allí más tiempo que los israelitas en el desierto; y no adelgaza ni nada. ¿Qué narices comía? Pues se comería algún oso polar que otro, porque a base de hierbitas y pececitos de la mar salada no conservas ese tipazo.

Bueno, que el capítulo seguía, si es que no me dejáis contaróslo (¡Es que nos importa una mierda! ¡Queremos ver tetas!) Pues aquí no las vais a encontrar, así que os bajáis a la panaderia de abajo de vuestra casa y le quitáis la camiseta a la primera clienta que pase. Y sigo.

-Cállate, zorra. Bien, el caso es que una paciente me dijo que un día conoció en unos de sus viajes a un tipo que experimentaba con diferentes tipos de criogenización. El caso más importante era la transplantación de cabezas de animales en cuerpos humanos. Cabezas de conejos, para ser más exactos. Me dijo también que el muy capullos las tenía en jaulas y luego hacía visitas escolares para que los niños les pudieran escupir a la cara cojerles del rabo y cosas así.

-¿Pero que me estás contando? ¿Y tú te creíste esa historia?

-¿No acabas de ver el flashback? ¡ella había sido unos de sus sujetos!

-¿Cómo lo voy a ver si esto no es un vídeo?


Luego no sé qué más pasó, seguramente apareció la bruma esa de las narices y acabó el capítulo. Ni lo sé ni me importa.


Me siento cansado, abro los ojos y me encuentro tumbado en la cama de una chabola. ¡Ha sido todo un sueño! (Buah, qué tipico, no sabe como acabar la historia y dice que es un sueño. ¿Quién te crees que eres? ¿El guionista de los Serrano?) ¡Callaos de una puta vez! Sois más criticones que Risto Mejide...

El caso es que tengo que levantarme he ir a hablar con Locke. El calvo inválido que al llegar a la isla empieza a andar y le digo todo lo que he soñado. Entonces éste me sonríe de forma lasciva mientras uno de los compañeros del campamento disfrazado de conejo de colores reparte chocolatinas blancas entre los presentes.

-¿Y esto qué es?

-Esto es para ver elefantes rosas y cabezones con números de sabores en las orejas.

-Eso, amigo mío, es lo más inteligente que he oído hoy. -le digo mientras me como la chocolatina y empiezo a ver como a lo lejos, hay una horda de elefantes rosas cabalgados por los cabezones.

domingo, 5 de junio de 2011

A ver

Esa misma noche, el doctor Parnasus lleva a cabo el experimento. Escoge a un sujeto de entre los cientos que se han presentado al casting. El riesgo es alto, pero la recompensa es jugosa. Dos sugus de piña, esos de envoltorio azul, y tres botones amarillos.

Al sujeto en cuestión le coloca pinzas en los párpados, y ahora a esperar. ¿Será capaz de estornudar con los ojos abiertos? Pasaron 3 horas, 22 minutos y 17 segundos. Parece que viene el estornudo. Las pinzas salen disparadas. Fracaso absoluto. Después de 32 intentos con todo tipo de pruebas, desde cinta de carrocero de doble cara hasta con gatos hidraúlicos, todos han falado. El doctor Parnasus está desesperado, así que deja el experimento un rato y se relaja haciendo lo que más le gusta, poner nombre a las cucarachas de su laboratoio y montar divertidas escenificaciones de películas de Tarantino. Después de las escenas de Kill Bill y Malditos Bastardos, ya se siente con fuerzas para volver a intentarlo.

Mientras tanto, Ambrosio (el sujeto elegido) sigue sentado y atado en la fría taza de váter.

-¿Cúal crees que es el problema?

-Bueno, hasta ahora no me he propuesto mantener los ojos abiertos.

Así que una vez más, esperan al estornudo. Tras veinte largos segundos, no puede más, así que el doctor se ve obligado a provocar el estornudo de la manera más efectiva posible: leyendo las propuestas de cambio político de los principales candidatos a la alcaldía. Y es que Ambrosio había sido elegido por su alergia a las estupideces.

El enclenque sujeto por fin estornuda, y efectivamente sus ojos salen de sus córneas a una velocidad de vértigo, con sus desastrosas consecuencias. Botellas de orines variados estalladas en el suelo, cuadros de narices famosas rajados y el techo cubierto de una capa de una sustancia verdosa goteante, que poco más tarde descubrieron que eran mocos.

¿Pero dónde estaban los ojos? Parecía que habían huido del lugar de la catástrofe. Y es que unos ojos sin dueño son muy peligrosos. Sólo quieren mirar y mirar. Y claro después de haber visto aquella escena se asustaron, salieron rodando y rodando del laboratorio y se fueron a ver mundo.

jueves, 2 de junio de 2011

Sudoroso y fatigado

No sé si me conoceréis o no. Es posible, puesto que éste es mi blog número 5 por lo menos. Que alguno pensará “qué caña de tío, lleva 5 blogs al mismo tiempo”. Pues mentira cochina y olorosa. La verdad es que esos blogs (además de tumblr, fotolog y otras redes de expresión digital tecnológica) fracasaron estrepitosamente. ¿Por qué? Puede ser por la falta de fans, la vagancia que normalmente invade mi cuerpo o la falta total y absoluta de paciencia que tengo para conseguir adeptos que se unan a mis filas de lectores. Puede ser por todo eso o por algo que no tenga nada que ver.

Sabiendo todo lo que acabo de deciros, no sé por qué seguís leyendo esto, deberíais saber tan bien como yo que este blog también está destinado al fracaso. Además os preguntaréis por qué, sabiendo yo mismo como persona humana que soy, que este espacio no lo va a visitar nadie (salvo algún usuario despistado y acosado por el tedio que va a la deriva de blog en blog), estoy escribiendo esto. El caso es que soy una persona de impulsos. Y estos días estoy leyendo un blog muy interesante sobre un tipo que escribe sus paranoias (y menudas paranoias) en un dicho blog. Y me he dicho a mí mismo:

-¿Por qué no haces lo mismo?
-Ya sabes cómo va a terminar todo.
-Quizá es diferente esta vez.
-Sabes que no.

En fin, no sé cómo terminó la conversación, el caso es que aquí estoy, delante del ordenador, escribiendo en el word como un poseso sudoroso y fatigado todo lo que me pasa por la mente.

Pensádolo mejor, eliminad esa imagen de la cabeza. No quiero esa primera impresión. Imaginadme como más gustéis.

Aquí tenéis el blog que me animó a escribir esto.